¿Cómo es que Frank Sinatra se convirtió en mi musa literaria?

¿Quién hubiera imaginado que la voz de Frank Sinatra sería la banda sonora de mis escritos?

Imagina por un momento una voz que no solo canta, sino que te susurra secretos al oído, te cuenta historias y te transporta a una era dorada. ¿Y si te dijera que esa voz ha moldeado mi forma de escribir de manera tan profunda como lo hizo con la música del siglo XX? Sí, estoy hablando de Frank Sinatra, “La Voz” que se convirtió en el eco de mis palabras y el ritmo de mis puntos y comas.

Frank Sinatra, ese ícono indiscutible, empezó a dejar huella en el mundo con su primer número uno en Billboard en 1940, junto a Tommy Dorsey, con la canción “I’ll Never Smile Again”. Este hito no solo marcó el comienzo de su carrera, sino que también lo catapultó como un fenómeno social. ¿Quién diría que este joven de Hoboken llegaría a ser comparado con figuras de la talla de Elvis Presley y los Beatles?

¿Pero qué tiene Sinatra que lo hace tan especial para un escritor?

Francis Albert Sinatra no era solo un cantante; era un narrador de emociones. Cada una de sus interpretaciones era una lección sobre cómo transmitir sentimientos y atmósferas sin necesidad de excesos. Desde compositores…